Algodón de azúcar es el gel de masaje que hará que sus encuentros de amor sean irresistiblemente dulces. Extiendalo en las áreas más sensibles del cuerpo y multiplica el placer: gracias a su efecto de calefacción en contacto con la piel, también es comestible, por lo que puede ceder con seguridad al perfume y el sabor de la Aperol.